(Siendo un poco abogado del diablo, sé que coordinar un evento de tal magnitud no es sencillo)
Algunos aspectos a destacar:
No hubo mucha presencia de medios de comunicación.
A lo largo del trayecto las personas desde las ventanas de su casa saludaban en señal de apoyo
Y el momento crucial: una señora desde la terraza de su casa, mostraba un afiche con la cara del presidente Maduro, a lo que el colectivo respondió con un contundente ¡FUERA! ¡FUERA! Que estremeció la ciudad
La guinda de oro estuvo en la tarima, donde entre tanto hablar se mencionaba al difunto y la revolución con bastante frecuencia, a lo cual casi nadie prestaba atención, pues tomar fotos, hidratarse, descansar de la caminata y disfrutar el encuentro entre amigos captaba más la atención de las personas, que el trillado y obsoleto discurso
Las fulanas elecciones a la que se había convocado de unos supuestos candidatos LGBTI a la asamblea no las vi… pero como no soy omnipresente alguien más me contará sobre eso…